"LEER" EL SİSTEMA
En el capitulo precedente hemos
intentado explicaros lo que significaba la palabra "leer". En el
presente capitulo intentaremos aclarar algo sobre el sistema que
debemos leer...
Estamos aquí, sobre la tierra, en
posesión de cualidades que difieren de una persona a otra, cuya
elección escapa a nuestro control y a nuestros deseos. No hemos
escogido ni nuestros lugares de nacimiento, ni nuestras razas, ni
nuestras familias, ni nuestros padres, como tampoco nuestros sexos.
Estamos implicados en una competición que con toda evidencia se ha
iniciado en una situación de desigualdad.
En contraste con nuestro pasado
inamovible y nuestro origen, nos enfrentamos con un futuro en el que
pensamos poder cambiar nuestra suerte.
En el sistema que Allah ha creado
y que llamamos comúnmente la "naturaleza", no se tiene en
consideración ninguna excusa ó sentimiento...
Tras haber capturado una gacela o
un búfalo, el león comienza a despedazarlos y a devorarlos cuando aún
están vivos, sin la menor piedad, a pesar de la resistencia y los
gritos de sus víctimas... Poco importa la excusa que pongáis, el vaso
que se os escapa de las manos se romperá forzosamente cuando caiga
sobre un suelo de mármol. El potente siempre machaca al débil
Si por una parte manifestamos
nuestra piedad por los animales degollados con ocasión del ‘Aid del
Haÿÿ, no es menos cierto que por otro lado, no dejamos jamás de ir a
las carnicerías. No apreciamos una comida sin un buen filete, como no
podemos pasarnos sin pollo ó cordero para la cena. Cuando salimos de
pesca, digamos que para quitarnos el estrés, disfrutamos del placer de
matar peces del mar.
A decir verdad, vivimos en un
sistema, un orden en el que el potente anula al impotente, y el mas
fuerte devora al débil. Y esto se aplica en todos los dominios, todas
las dimensiones y todos los niveles de la vida...
Es en este sistema y en este
orden, en el que el Rasul Muhammad (s.a.s.) ha intentado comunicar y
hacer comprender a las gentes la incontestable verdad siguiente:
No hay un dios alejado de los
humanos, de los mundos y las galaxias; solo existe Allah, quien por Su
propia ciencia ha creado todo lo existente a partir de las cualidades
de Sus mas bellos nombres (asma’ l-husna). En consecuencia, todo
esfuerzo para adorar a tal dios es vano. Semejante comportamiento
lleva siempre a la ignorancia de la "Verdad".
En el sistema de Allah, el hombre
debe limitarse a dos tipos de actuaciones:
1. Conocer a Allah en tanto que
es la realidad propia del hombre y su verdad misma (haqiqa).
2. Prepararse para la vida
después de la muerte realizando las practicas especificas (‘ibada),
con el fin de percibir las cualidades de las que ha sido provisto.
El sistema funciona sobre la base
del principio según el cual cada uno vive los efectos naturales de su
propia constitución y su propia capacidad.
Cada uno se encara y asume los
resultados de sus propios actos. Esta es la regla en el sistema de
Allah. El Corán lo pone de manifiesto en los siguientes versos:
"Cualquiera que haya realizado un
átomo de bien, lo verá".
"Cualquiera que haya realizado un
átomo de mal, lo verá".
En otros términos, los que estén
preparados para las condiciones del mundo de la vida después de la
muerte, escaparán a los tormentos de este entorno. Los que no estén
preparados para tales condiciones, tendrán que sufrir las
consecuencias.
El Enviado de Allah (s.a.s.) ha
advertido a las gentes en cuanto a las condiciones del mundo de la
vida después de la muerte y los ha informado de la necesidad de
prepararse.
Las gentes tienen que prepararse
para las condiciones de la vida después de la muerte, observando
ciertas prácticas, no al objeto de adorar a quien quiera que sea, sino
por sumisión al sistema, al orden que Allah a creado.
Es por esto por lo que tenemos
ante todo, necesidad de aprender y de comprender lo que es el sistema
y el orden de Allah, que llamamos "Din", con el fin de percibir bien
la intención que se esconde tras tales recomendaciones, y de no
abandonar estas prácticas que son de una importancia vital.
Sepamos que todas las prácticas
recomendadas por el "Din del Islam" están basadas en un razonamiento
científico-técnico y producen sus resultados automáticamente. Ninguna
de estas recomendaciones viene de lo alto.
Las prácticas islámicas son las
tareas recomendadas por el sistema. En consecuencia, necesariamente
debemos comprender seriamente y sistema y el orden creados por Allah.